EUTONÍA, MOVIMIENTO DESDE Y HACIA EL SER

“Expresamos y comunicamos nuestros estados de ánimo, pensamientos, afectos, a través
de nuestra conducta, de nuestros movimientos. Éstos, además, contienen nuestra historia
personal condensada en el presente.” – Y tal vez nuestra historia ancestral, como especie
humana–
“Es importante señalar aquí el carácter dinámico de nuestro cuerpo en movimiento. Cada
situación requiere que adoptemos una postura diferente y, por lo tanto, también nuestros
estados son distintos. Por eso no podemos hablar de una buena o mala postura, sino que
tenemos que pensar en la capacidad de adaptación de nuestro cuerpo (plasticidad) a las
exigencias de la situación presente y en las características personales del sujeto. Por lo tanto,
desde esta concepción, es inadecuado enseñar mostrando un modelo ideal. Cada uno tiene
que encontrar la postura y los movimientos adecuados a su estructura psicofísica y a su estilo
de vida. El camino propuesto por la eutonía para lograrlo es la exploración (sobre sí).”
Vishnivetz, Berta. Eutonía. Educación del cuerpo hacia el ser. Ed Paidós. Buenos Aires, 1996.-
Esta búsqueda individual propende a la recuperación de la propia identidad, en
consonancia con lo auténtico en cada uno, sin desechar totalmente lo aprendido.